Homónima

De tus labios adalid,

De tu risa, luchador.

Que te siente, que te pierde

Que te escucha... 

Tu dolor.

Que mi actitud

aliciente y zalamera

que tendéis a desestimar

Te demuestre que te quiero

Lejos de tu causticidad.

Volando entre mis nubes

Allí te quiero vislumbrar.

Así no caigas en mis brazos

Sé que jamás 

Te atraparán.

Soy un achacoso permisivo.

Soy tu percance; tú mi camino.

B Complex

Mientras tú seas feliz,

Nada me impide sufrir tranquilo.

Gozando del amor que me rodea

Que lánguidamente... susurra un triste olvido.

Ya no espero más las desilusiones,

Cuales gotas de una lluvia carentes de expresiones.

Ya no espero más verme en tus ojos...

Tan grandes y perfectos, cuencas vacías de tonos rojos.

Sin embargo, me arrojo a la desventura...

Desesperado entre la angustia, que sublime, me depura.

Última bocanada de aire sutil y sincera...

He de caer, pues, nuevamente... finalizando así tu espera.

Gracias por este galimatías.

Mentiras

Creció profundo, descolgado, irritante.

Frustróse por el culto, saliendo de palabra.

Verde y lívido, me tomó agreste.

Con mentiras,

que a lo lejos,

se perdieron en una senda...

Trató callado; luchó a truncarse.

Vivió del esfuerzo en sus ojos sostenido.

Rojo y arisco, me perdió en un atisbo.

Con mentiras,

que a lo lejos,

se perdieron en una senda...

Murió apagado, inconcluso, sin palabras.

Expió su sangre, vendiendo su cordura.

Negro e invisible, exhaló su condena.

Por mentiras,

que tan cerca,

te ciñeron a tu destino.

-
El tiempo no va a cambiar una jovialidad agotada.

Cometa Atmosférico

Rezago del suspiro... 

Evade mi sombra. 

Se dispara... 

Intranquilo.

Cruentas caricias... 

Que te mitigan profundamente.

Que te encienden.

Y amargas, beben desde tus párpados...

La promesa de un vestigio:

El origen de una tormenta...

Fría y dulce, en su morada.

Donde me duermo, ante su puerta.

Puliendo un cristal uniforme,

Dando vida a una esperanza.

Mato en ella el dolor errante...

de, en tu mente, un equívoco.

-

Despídete, benévolo carcamal.

Ilusión inocente

Mi pensamiento dicho y hediondo, 

De ideas pálidas sin sentido, que careces...

Se lleva mi alma. Bendita tu calma... 

De arneses que cuelgan de tu deseo pendiente.

Arrastra y sofoca, cual su distancia, 

Un camino a tu boca, y a mi elegancia. 

El sollozo sin par de una esquina,
Que tiene tu nombre.

Ocultóse tan de prisa que aquellas imágenes, 

Aquellos fragmentos...

En desdicha, se plagan de cientos...

Huyendo de miles. 

Contemplo...

Detalles en mano, 

Bolsas de rubíes, 

Joyas en vano, 

Y sonrisas miles.

-
Mancillar mi cordura,
o chochear por tu irrelevancia,
que tanto me importa.